Es curioso que, siendo hoy el Día de las Fuerzas Armadas, mi entrada trate sobre el tambor y la música militar.
Como percusionista, he estudiado rudimentos para caja suizos (la tradición del Tambor de Basilea), franceses (Batard, Coup de Charge, Coup Anglais, Moulin, Coup du Rigodon...), alemanes (Druck Ruf, Schleifschlag, Französischer Ruf...), holandeses (Lange Voorslag, Dubbele Slagen, Verwisselslagen...), escoceses, americanos... Conozco los 26 rudimentos de la antigua NARD, los 40 del PAS, y las muchas posibilidades que ofrecen los Hybrid Rudiments... Lamentablemente, y aunque sea una contradicción, nunca he estudiado la tradición española referida al tambor.
Como sabemos, el origen de la caja es, de todo punto, militar, y por mor de la invasión árabe, fue España el primer país europeo que conoció este instrumento. El tabor, atambor, atabal, enseguida encontró acomodo en el ejército, y si tenemos en cuenta que España dominó el mundo durante varios siglos, es lógico que un instrumento eminentemente militar fuera de suma importancia en el ejército más poderoso del momento (además, siempre contó con el apoyo de cuerpos mercenarios como walones y suizos, y estos últimos fueron los que iniciaron la tradición rudimental).
Por todas estas razones, es lógico pensar que, aunque hoy poco conocida, España contó con una tradición propia respecto a la caja.
En éstas me encuentro: investigando y estudiando todo lo referente a nuestra tradición nacional, y seguro que futuras entradas de este blog tratarán de este asunto.
Mientras tanto, quiero comentaros algunas cosas que voy descubriendo, y que me hacen ver que tenemos la música militar mucho más interiorizada de lo que creemos.
Gracias al servicio de petición de fondos de la Biblioteca Nacional de España, me he hecho con una copia (que se sepa, sólo queda un ejemplar) del "Libro de la Ordenanza Delos Toques de Pifanos y Tambores Que se tocan Nuevamente en la Infanteria Española Compuestos por Dn Manuel Espinosa 1761".
Ya aquí podemos ver la asociación que siempre hubo entre cajas y pífanos como arma de la infantería (tropas de a pie), como contraposición a la asociación de trompetas/cornetas y timbales como instrumentos propios de la caballería (la asociación timbales/trompetas se mantuvo cuando estos instrumentos se incorporaron a la orquesta).
En este cuaderno podemos encontrar un toque de Retreta con la siguiente función, según las Reales Ordenanzas de Carlos III (¡vigentes hasta 1978!): "El toque de Retreta servirá á la hora que en Campaña señale el General, en Guarnición el Gobernador, y en Quartel el Comandante de él, para retirarse á sus Tiendas ó Quarteles los Soldados que aun no se hubieren recogido, como asimismo para que la Tropa que vaya marchando adelante dé media vuelta á la izquierda, y lo execute en retirada". Estoy seguro de que nos resulta sumamente familiar:
Interpretado por una banda de guerra, la podemos escuchar aquí:
Las pequeñas discrepancias entre la interpretación y la partitura se deben a que están tocando una versión posterior, de 1769, y cuyo original se encuentra en la Biblioteca Real.
Luigi Boccherini, afincado en España, obviamente oyó esa Retreta, y la citó en su conocidísima obra (interpretación del Boccherini Ensemble):
Entrado el siglo XX, Luciano Berio escribe su propia versión:
Muy inteligentemente, Berio orquestó sus variaciones con unos ostinatos de caja, y los primeros instrumentos que tocan el tema son las flautas, lo que nos lleva al origen de esta música: pífanos y tambores.
Más reciente es la versión de David del Puerto. Esta versión es de la Orquesta Sinfónica de Gijón, grabada en directo el 7 de febrero de 2009 en el Teatro Jovellanos de Gijón dirigida por Óliver Díaz, con Rafael Casanova tocando mis timbales barrocos (los mismos cuya restauración pudisteis ver en el post "Restauración de Timbales Barrocos"):
Esta versión, que prescinde de la caja y usa timbales, no me acaba de convencer desde un punto de vista historicista.
Es curioso que un tema que solemos asociar a Boccherini, sea en realidad de Manuel Espinosa... Probablemente, ni siquiera fuera Espinosa el compositor, siendo éste un mero recopilador y ordenador de una melodía militar anterior.
De cantidad de cosas curiosas está lleno el catálogo de musica militar española. Poco a poco, os iré dando cuenta de ellas.
(Me gustaría agradecer a Don Manuel Mefre González la instimable ayuda prestada con relación a la elaboración de esta entrada).
(Me gustaría agradecer a Don Manuel Mefre González la instimable ayuda prestada con relación a la elaboración de esta entrada).
…et in Arcadia ego.
© David Valdés
¡Y tan curioso! Me acabas de dejar de piedra, David. Nunca se me había pasado por la cabeza que el famoso tema de Boccherini fuera en realidad un toque militar.
ResponderEliminarPor otra parte, me viene a la mente la versión de esta obra por Jordi Savall, que tan amante como es de las versiones libres, y de la percusión, no añadiera una caja a esta música. También es cierto que la grabación que hizo de este quinteto sigue al pie de la letra la partitura de Boccherini.
¿Cómo conociste tú el origen de esta obra?
Un saludo.
Hola.
ResponderEliminarMuchas gracias por el comentario.
Respecto a cómo supe del origen, fue casi por casualidad. Investigando la existencia de rudimentos españoles para tambor, descubrí que lo más antiguo que existe es ese libro de Espinosa que menciono. Me hice con una copia, y tarareando la melodías, descubrí varias conocidas. Como las versiones de Berio y Del Puerto las he tocado (la de Boccherini la conocía, pero como percusionista no la pudo tocar, pues no "estoy presente" en la intrumentación), la melodía la tenía muy presente, por lo que enseguida caí en la cuenta de que Boccherini citaba.
Es como si hoy, alguien hiciera una cita de La Macarena de los de Río en una sinfonía: el oyente actual enseguida identificaría el tema, pero dentro de 300 años, nadie se acordará de ella.
Lo mismo pasa con el toque de retreta: en tiempos de Boccherini, era una melodía conocida por todos, pero hoy día, no la conoce nadie como tal, si no como algo que se le ocurrió a Luigi (cuando no es así).
La música culta está llena de citas de la música popular, militar, religiosa... Es imposible que un oyente conozca toda la música compuesta: por eso, muchas veces las citas a una música ya existente se nos escapan.
Saludos.